Álvaro Uribe va a juicio
El día de ayer (27 de abril), en horas de la noche terminó la audiencia que buscaba que el proceso por soborno y fraude procesal en contra del expresidente Álvaro Uribe fuera archivado, pero sigue más vigente que nunca y el acusado tendrá que ir a juicio.
Estos días han sido de mucha importancia en el ámbito político a nivel nacional, los casos más relevantes han sido la moción de censura en contra del ministro de Defensa Diego Molano por el caso de la masacre en Putumayo, también la confesión de diversos militares que aceptaron la participación en falsos positivos por mantener satisfecho a un gobierno, el caso Uribe, las elecciones presidenciales y hasta la conmemoración del primer aniversario del estallido social en Colombia.
Lo cierto es que gran mayoría de los casos están relacionados directa o indirectamente con el que fue mandatario entre el año 2002 y 2010, en este momento la mayor preocupación de Uribe es, por el momento, el juicio que tendrá que afrontar y por el cual miles de personas demostraron su felicidad en redes sociales por la decisión final que tuvo la jueza Carmen Helena Ortiz.
Por otra parte, en la primera audiencia de reconocimiento en la JEP diversos militares confesaron sus crímenes en el gobierno de la seguridad democrática, el evento fue realizado en Ocaña, Norte de Santander, allí 10 militares confesaron los asesinatos de alrededor de 120 inocentes y además desapariciones forzadas.
Muchos familiares de las víctimas esperaron durante años dichas declaraciones y saber de voz propia de los victimarios lo sucedido, aunque algunas de las confesiones son absolutamente desgarradoras; “asesinamos cobardemente a campesinos”, “les mentimos y asesinamos a sus familias”, «Reconozco y acepto mi responsabilidad como coautor de estos crímenes de guerra» declararon militares en la Jurisdicción Especial para la Paz.
El número de asesinados a nivel nacional como falsos positivos es de 6.402, sin contar los posibles casos que podrían ser sumados a esta estremecedora cifra en las masacres que se han vuelto costumbre en el gobierno de Iván Duque, pero que aún siguen en proceso de investigación.
Por ahora, las víctimas de atroces crímenes esperan que se haga justicia por una violencia desbordada a lo largo de cantidad de años y hasta los más poderosos hagan las debidas confesiones, poco a poco se van esclareciendo los hechos.
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